Historia

¿Sabías qué los pastores australianos están estrechamente asociados con la vida de los vaqueros debido a su popularidad como perros pastores, o perro ganadero en los ranchos?

Este perro, también conocido como pastor ovejero australiano, no proviene de Australia como su nombre puede sugerir. Fueron desarrollados en el siglo XIX para trabajar en ranchos, pastoreando ganado y realizando diversas tareas de trabajo. Se cree que el pastor australiano probablemente vino de la región vasca de España. Los pastores vascos primero llevaron a sus perros con ellos a Australia y luego a los Estados Unidos, principalmente en California, por lo que los estadounidenses llamaron a los perros pastores australianos. La raza, tal como la conocemos hoy, se desarrolló únicamente en los Estados Unidos.

Los ganaderos estadounidenses amaban a los pastores australianos porque eran grandes pastores, pero los australianos alcanzaron la fama entre la población en general debido a sus frecuentes apariciones en rodeos. Los australianos no solo podían ayudar a arrear a los toros, sino que también podían realizar trucos. Los pastores australianos también han sido llamados pastores españoles (lo que tiene más sentido, dado su lugar de origen), perros pastores, pastor ganadero australiano, pastor ovejero australiano, blue heelers, pastores de Nuevo México, y pastores de California.

El pastor australiano es una de las pocas razas de perros que comúnmente tienen ojos de dos colores diferentes, lo que se conoce como heterocromía. Los australianos pueden tener cualquier combinación de ojos marrones, azules, avellana, ámbar o verdes. Algunos australianos incluso muestran más de un color dentro del mismo ojo.

Además de tener una predisposición genética a la heterocromía, los pastores australianos tienen una posibilidad entre cinco de nacer con una cola naturalmente meneada.  Los rancheros criaron esta raza puesto que el pastor ganadero australiano tenía colas naturalmente cortas porque son más seguros cuando se trata de pastoreo. Estos perros son conocidos como "sin cola" o "bobtail". Esta característica puede ser heredada genéticamente y es el resultado de la selección natural o de cruces selectivos en el linaje de la raza.

Carácter y temperamento

Los Pastores Australianos se caracterizan por su inteligencia, energía y lealtad. Son excelentes compañeros para la familia y pueden llevarse bien con niños y otros animales si se socializan adecuadamente desde temprana edad. Pueden mostrar un instinto protector y necesitan estimulación mental y física para evitar el aburrimiento y comportamientos no deseados.

El Pastor Australiano es un perro activo, de pensamiento independiente, receptivo, audaz y alerta. Esta combinación puede resultar demasiado exigente para los propietarios que no pueden dedicar horas todos los días a interactuar con su perro. Los australianos criados en líneas de trabajo tienden a ser más exigentes que los criados en líneas de compañía o de exhibición. Sin embargo, todos los pastores australianos tienen estos rasgos hasta cierto punto.

Son perros muy juguetones, interactivos y demostrativos, receptivos a las órdenes y rápidos para aprender. Los australianos a menudo se muestran distantes con los extraños y pueden ser dominantes con los perros desconocidos. Son perros guardianes alertas y perros de protección bastante efectivos. Algunos pueden ladrar en exceso, pero no es algo muy común. Cabe señalar que estas afirmaciones son generalizaciones tradicionales y ampliamente aceptadas sobre la raza, y el comportamiento de los pastores australianos individuales puede diferir.

Cuidados

Los Pastores Australianos son perros leales y afectuosos que disfrutan de la compañía de su familia. Requieren atención y tiempo de calidad con sus propietarios para mantener un vínculo fuerte. Además, necesitan un entorno estimulante y seguro, con suficiente espacio para jugar y explorar. Necesita un trote largo o un juego vigoroso durante al menos una hora al día.

Los pastores australianos disfrutan recuperar, nadar, tirar y correr. Les gustan especialmente y sobresalen en deportes caninos como el pastoreo, la agilidad, la obediencia, el olfato, el rastreo y el buceo en muelle. En casa, el pastor australiano debe tener un patio bien cercado, aunque generalmente no es un artista del escape, para poder correr a gusto, o en su caso, tener acceso al aire libre como parques o espacios caninos destinados a su ejercicio.

Se sugiere que los perros pastores australianos de color mirlo no deban cruzarse entre sí. La cría selectiva entre perros mirlos puede aumentar la probabilidad de ciertos problemas genéticos y de salud, con mayor incidencia de enfermedades oculares y sordera. Algunos pastores australianos también tienen colas cortas. Dichos perros tampoco deben criarse juntos, ya que algunos descendientes tendrán graves defectos en la columna. Es importante consultar con criadores responsables y expertos en genética canina para obtener más información y orientación específica sobre la cría de pastores australianos mirlos.

Ahora ya sabes lo necesario del también denominado perro ganadero australiano. Recuerda que tener una mascota implica proporcionarles amor, atención, alimentación adecuada, cuidados veterinarios, ejercicio y un entorno seguro. En Purina, entendemos la importancia de esta responsabilidad y estamos comprometidos no solo en brindarles una alimentación nutritiva, sino también en información y consejos, además de un acompañamiento a todos aquellos que deseen tener una mascota en cada etapa del camino.

Aseo

El pelaje del Pastor Australiano tiene una longitud media y requiere de un cepillado regular para mantenerlo limpio y sin enredos. En general, las sesiones semanales mantendrán el pelaje impermeable de doble capa del pastor australiano con el mejor aspecto. Sin embargo, durante la temporada de muda, se requerirá más trabajo. Durante este período se recomienda utilizar el cepillo de fondo cada dos o tres días para eliminar el abundante pelo muerto, seguido de una limpieza con el cepillo de alambre.

Los australianos a menudo trabajan y/o juegan al aire libre, por lo que no es inusual que se ensucien con regularidad. Pero a menos que se hayan metido en una situación particularmente complicada, solo necesitan un baño ocasionalmente. Como en todas las razas, las uñas del Aussie deben cortarse con regularidad, pues ayuda a mantener una longitud adecuada y evita que se claven o se partan.

Alimentación

Es primordial suministrar una dieta equilibrada y de calidad que satisfaga las necesidades nutricionales del Pastor Australiano. La cantidad de alimento dependerá de su edad, tamaño, nivel de actividad y metabolismo, aunque por lo regular esta oscila entre 1.5 a 2.5 tazas de alimento seco de alta calidad al día, repartidas en dos comidas. Para determinar la dieta adecuada y evitar la obesidad, que puede tener consecuencias negativas en su salud, es recomendable consultar con un veterinario.

Si tienes dudas acerca de si tu perro tiene sobrepeso, puedes realizar una evaluación visual práctica. En primer lugar, observa a tu perro. Deberías ser capaz de distinguir una cintura definida. Luego, coloca tus manos sobre su espalda, con los pulgares a lo largo de su columna vertebral y los dedos extendidos hacia abajo. Deberías ser capaz de sentir, pero no ver, sus costillas sin tener que aplicar una presión excesiva. Si no puedes sentir sus costillas, eso significa que necesita reducir la cantidad de comida y aumentar la cantidad de ejercicio que recibe.

Adiestramiento

Los Pastores Australianos poseen una alta inteligencia y energía, lo que los hace receptivos al adiestramiento. Se recomienda utilizar métodos de entrenamiento positivos y recompensas para fomentar un comportamiento apropiado. El adiestramiento debe iniciarse desde temprana edad e incluir comandos básicos, socialización y obediencia.

La socialización temprana y el entrenamiento son imprescindibles para el pastor australiano. Una de las razones más frecuentes por las que los australianos terminan en situaciones de rescate es que los dueños no pudieron (o no querían) canalizar constructivamente la energía ilimitada de la raza a través del entrenamiento.

Los australianos se unen fuertemente a sus familias y, por lo tanto, pueden ser territoriales y sobreprotectores de la propiedad de sus dueños, y pueden volverse destructivos si se les deja sin compañía durante períodos prolongados con demasiada frecuencia. Afortunadamente, esa lealtad combinada con la aguda inteligencia y la gran energía de la raza los hace muy fáciles de entrenar.

Problemas comunes de salud

Algunas condiciones para tener en cuenta incluyen displasia de cadera, displasia de codo, afecciones oculares, especialmente las cataratas, epilepsia y sensibilidad a determinados medicamentos. Las orejas de un australiano deben revisarse regularmente para eliminar materias extrañas y evitar la acumulación de cera, y sus dientes deben cepillarse regularmente. Es fundamental realizar revisiones veterinarias periódicas, mantener al día las vacunas y ofrecer una alimentación equilibrada para asegurar su óptimo estado de salud.

Medicina Preventiva

Los Pastores Australianos, como cualquier otra raza de perros, requieren seguir un programa regular de vacunación para protegerlos de enfermedades comunes. Las vacunas principales recomendadas abarcan la protección contra la rabia, parvovirus, moquillo, hepatitis y leptospirosis. Estas cinco vacunas son consideradas esenciales y se recomienda administrarlas a todos los perros Pastor Australiano. Además de estas vacunas, existen otras opcionales que pueden ser recomendadas según el entorno y el estilo de vida del perro, como la vacuna contra la enfermedad de Lyme y la vacuna contra la tos de las perreras. Para establecer un plan de vacunación adecuado a tu Pastor Australiano, consulta a tu veterinario.