Pelo de gato: una guía para el cuidado del pelaje felino
El pelo de gato no solo es una de las características más distintivas y admiradas de nuestros felinos, sino que también cumple funciones esenciales para su salud y bienestar.
El pelo de gato es lo que les da a nuestros amigos felinos una apariencia tan elegante y suave al tacto, además de actuar como barrera. Igualmente, es también es un elemento de termorregulación.
Por tanto, comprenderás que el cuidado del pelaje felino es algo que debemos considerar a la hora de tener uno, pues es una parte fundamental de sus vidas. Por supuesto, también de la tuya, porque, eventualmente, podrás encontrar mucho pelo de gato, si es que decides adoptar un minino.
Mantener en buen estado el pelo de gato es más que una cuestión estética, por eso, es importante que los tutores conozcan los cuidados adecuados para cada tipo de pelaje, detecten señales y brinden atención preventiva con el apoyo de un veterinario.
Pelo de gato: ¿por qué es importante el pelaje en los gatos?
El pelo de gato no es solo un factor estético en estos animales; de hecho, cumple múltiples funciones en los felinos. Sirve primero a manera de barrera natural que protege su piel de factores externos como el sol, el frío, el calor y las heridas leves.
El pelo de gato también contribuye a la regulación térmica, ya que les ayuda a retener calor. De igual manera, es clave para detectar estímulos sensoriales, pues el pelaje y, sobre todo, los bigotes de los michis, hacen parte importante del sentido del tacto en los felinos.


Así mismo el pelo de gato forma parte importante del lenguaje corporal gatuno, ya que puede erizarse para denotar miedo o agresión. Además, es un buen indicador del estado general de salud del michi.
Un gato saludable usualmente tendrá un pelaje reluciente y suave. Problemas como la caída excesiva, la sequedad, opacidad o presencia de parásitos pueden indicar deficiencias nutricionales, estrés o enfermedades que requieren atención veterinaria.
Tipos de pelo de gato y cómo cuidarlos
El pelo de gato puede clasificarse en varios tipos dependiendo de su longitud y textura, y claro, hay tantas opciones como michis existen, ya que estas dos características varían según cada animal. Aun así, en líneas generales, estos son los diferentes tipos que puedes encontrar en la gran mayoría de mininos:
- Pelo corto: Es el más común. La mayoría de los gatos tienen este tipo de pelaje. Requiere menos mantenimiento, pero también necesita cepillados regulares para eliminar el pelo muerto que puede acumularse con el tiempo.
- Pelo largo: Es menos común y sólo se da en determinadas razas de gato. Tiende a enredarse y formar nudos si no se cepilla con frecuencia y requiere una rutina de cuidado más constante.


- Pelo semilargo: Este tipo de pelo de gato es una interesante combinación, en algunas zonas tienen pelaje más largo y en otras similar al corto estándar, otorgándoles figuras interesantes y atrayentes pues esta mezcla suele generar rasgos como melenas o pequeñas crestas cerca de las orejas y mejillas. Se encuentra entre los dos anteriores y necesita cuidados moderados.
Cada tipo de pelaje demanda una rutina específica de higiene, cepillado y cuidado, pero la nutrición, como la que provee PURINA® PRO PLAN® Gatos es clave para mantener el pelo de gato en óptimas condiciones.
Signos de alarma en el pelaje de los gatos
El estado del pelo de gato es, usualmente, una buena forma de entender la salud general del michi, ya que hay múltiples alertas que nos puede dar. Presta atención a los siguientes signos:
- Caída excesiva de pelo o por zonas: Puede indicar estrés, alergias o desequilibrios hormonales.
- Áreas con pérdida de pelo o calvas: Podrían deberse a infecciones fúngicas, sarna o dermatitis y son usualmente claras señales de problemas dermatológicos.
- Pelo opaco, quebradizo o sin brillo: Suele estar relacionado con una dieta deficiente o problemas metabólicos. En este caso es buena idea revisar, con apoyo del veterinario, qué está comiendo el gato para ver si hay algo inadecuado en su nutrición.
- Presencia de caspa o escamas: Puede ser señal de resequedad, mala alimentación o parásitos externos.
- Picazón constante o lamido excesivo: A menudo se asocia con alergias, pulgas o problemas emocionales.
Si detectas alguno de estos síntomas, lo mejor es acudir al veterinario para obtener un diagnóstico y tratamiento adecuados para los posibles problemas dermatológicos de tu gato.
Consejos para cuidar el pelo de gato en casa
Ahora que sabemos las generalidades del pelo de gato veamos algunas recomendaciones prácticas para mantener su pelaje en óptimas condiciones según su tipo:
Cepillado regular
Cada tipo de pelaje tiene distintas necesidades de cepillado, lo importante es no olvidarlo. Si bien los gatos son muy aseados y suelen acicalarse mucho, a veces pueden necesitar ayuda externa.
- Pelo corto: para este tipo de pelaje solo se necesita cepillado entre 1-2 veces por semana, puede ser incluso menos en gatos que se limpien ellos mismos con frecuencia.
- Semilargo: 2-3 veces por semana. Para estos gatos el cepillado cuenta con una mayor importancia, sobre todo en las áreas donde su pelaje sea más grande.


- Pelo largo: estos michis requieren cepillado diario para evitar nudos pues, en este caso, las habilidades naturales de acicalamiento del gato pueden no ser suficientes dado el tipo y volumen del pelaje.
Alimentación equilibrada
Una dieta rica en ácidos grasos esenciales como el Omega 3 y 6 fortalece la piel y el pelaje. Por lo general, un gato con una nutrición balanceada tendrá un pelo saludable.
Hidratación constante
Asegúrate de que tu gato cuente siempre con agua fresca, ya que una buena hidratación influye en la calidad del pelo. Procura que tenga disponibles al menos dos bebederos, lejos de su comida y de donde hace sus necesidades.
Baños ocasionales
Bañar a los gatos no es algo que se deba hacer con tanta frecuencia. Ya que ellos mismos se encargan de limpiarse, este cuidado no es tan esencial como en otros animales.
Claro, un baño ocasional puede ayudar cuando las habilidades del gato y el cepillado ya no alcanzan a mantenerlo limpio. Eso sí, hay una excepción, en razas sin pelo los baños deben ser más frecuentes.
¿Cómo lidiar con el pelo de gato en el hogar?
Ya sabemos cómo cuidar el pelaje de nuestro felino, pero hay una realidad a la hora de tener un michi y es que el pelo de gato puede acumularse en muebles, ropa y pisos, especialmente durante las épocas de muda. A continuación, te damos algunos consejos para mantener tu hogar limpio:
- Usa rodillos quitapelusas en ropa y tapicería.
- Aspira con regularidad, especialmente alfombras y sofás.
- Coloca mantas o cobijas lavables en los lugares favoritos de tu gato para facilitar la limpieza.
- Cepilla a tu gato en un área designada para controlar dónde cae el pelo.
- Invierte en filtros de aire para reducir la cantidad de pelo flotante y alérgenos.
Cuidar el pelo de gato es una parte fundamental del bienestar de tu felino. Con las medidas adecuadas, no solo lograrás que tenga un pelaje hermoso, también contribuirás a su calidad de vida. ¡Tu michi y tu hogar te lo agradecerán!
Te invitamos a preguntar a tu veterinario de confianza por el alimento PRO PLAN® LIVECLEAR®, que permite controlar los alergenos del gato que se transportan en su pelo y que, generalmente, son los responsables de ocasionar las reacciones de alergia en humanos.
Recuerda que en PURINA® tu mascota es nuestra pasión. Por eso, para la adecuada protección del pelo de tu gato, procura cumplir con sus sesiones de cuidado, pero asegúrate también de darle nutrición de calidad como con PRO PLAN® Sensitive Optidual para gatos: su fórmula especializada le aportará a tu michi los nutrientes que necesita para un pelaje en óptimas condiciones.
FUENTES:
Grooming your cat: Essential techniques for a healthy feline